Una tradición gastronómica muy apanense
Por Juan Sabino Cruz
APAN, Hgo. – Galones de salsa verde y roja, masa de maíz, manteca, recipientes con exquisita tinga, frijoles, sesos y picadillo son algunos de los muchos productos que se requieren para elaborar las tradicionales enchiladas, molotes y tacos dorados en el mejor lugar, si, la esquina del sabor es Victoria y Aldama.
El negocio por muchos años fue atendido por la señora Martha, ahora se redujeron los días de atención, solamente hay servicio viernes y sábado a partir de las 19 horas y hasta acabar la mercancía, con el mismo sabor de siempre, ahora despachan las hijas de la duela.
Rápido encienden los quemadores, la manteca suena en los comales, el rico aroma sale del sencillo local, en punto de las siete de la tarde o noche, prenden un foco que indica que ya están en servicio.
El pequeño local se llena pronto, empiezan a pedir las tradicionales enchiladas que son una tordilla de maíz frita en manteca cubierta con salsa verde o roja, carne de res deshebrada y trociscos de cebolla, sencillo pero exquisito manjar difícil de describir.
Otros piden los molotes de sesos, tinga, picadillo o chicharrón, una delicia que tardan un poco más en su preparación, con masa fresca elaborada con maíz y una receta secreta se hace la tortilla, se rellena con el producto requerido y se pone a la manteca hirviendo, la voltean ocasionalmente y sale hasta que queda crocante, la escurren y va directa al paladar del cliente.
Algunos piden los taquito fritos rellenos de pollo, los mismos ya los llevan elaborados, únicamente los calientan y llega al comensal, entre otros delicios alimentos que acompañan con un refresco y delicioso café.
Amigos apresúrense y disfruten los antojitos muy mexicanos que dieron identidad al pueblo de Apan.

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