Pintan rocas, machetean árboles y dejan basura
Por Juan Sabino Cruz
TEPEAPULCO, Hgo. – Grave peligro corre la zona arqueológica de El Xihuingo, falsos “ambientalistas” invitan a realizar actividades deportivas de senderismo y a su paso van dejando destrucción, saqueo y muerte de la flora y fauna del lugar.
Integrantes del Comité Honorifico de Vecinos encargado de la Protección de la pirámide de “El Tecolote” y zona arqueológica del Xihuingo dieron a conocer que están organizados para proteger su patrimonio cultural, pero nadie los apoya para actuar en contra de quienes vandalizan y lucran con paseos por la montaña.
Afirman que Osvaldo Starpone, quien durante la pasada administración presidencial fue delegado del INAH en Hidalgo, es realidad es un cero a la izquierda, por su ascendencia extranjera jamás le intereso el patrimonio cultural de Hidalgo, sus ilógicas resoluciones siempre fueron más metálicas que lógicas.
DESTRUCCIÓN
Explicaron que han surgido grupo de supuestos deportistas practicantes del senderismo que organizan recorridos hasta llegar a la cima de El Cerro Grande, supuestamente la actividad es desinteresada en el aspecto económico, argumentan un interés por la naturaleza, pero hacen todo lo contrario.
Los protectores de El Xihuingo aseguran que personas desconocidas entran y alteran la zona al marcar las rocas y todo el escenario donde hay vestigios arqueológicos, ahí está el primer daño a la zona.
También dejan una enorme cantidad de basura, especialmente botellas de agua y gaseosas, además de bolsas de frituras, platos y vasos desechables, así como una gran variedad de desechos que poco a poco se apoderan del escenario.
Precisan que con machete destruyen árboles de ocote para marcar su ruta, además, cuando se quedan a pasar la noche en la montaña, arrancan árboles para hacer fogatas, lo cual representa un peligro de incendio en zonas de difícil acceso.
Lamentan que existan paseantes que presumen haberse encontrado con alguna serpiente y le hayan dado muerte, otros orgullosos exhiben figuras o ídolos de jade, piedra y barro que sacan del lugar, lo cual representa un saqueo de la zona.
Cierto que el lugar es hermoso, fue una zona arqueológica de los Teotihuacanos, desde la parte baja se observa estupendo paisaje con el fondo de los llanos del altiplano y los imponentes volcanes Popocatépetl e Iztaccíhuatl.
Los guardianes de El Xihuingo establecieron que urge que los tres órdenes de gobierno tomen conocimiento de los hechos e inicien una investigación para castigar a quienes hacen negocio con los paseos y destruyen la importante zona arqueológica de Tepeapulco.
Sentenciaron que, de seguir las irregularidades, no será remoto que un día se roben los hermosos petrograbados hechos antes de la época de la colonia, además de que se puedan seguir destruyendo las pocas pinturas rupestres del lugar.