Familiares temen por vida de interno
Por Juan Sabino Cruz
ACTOPAN, Hgo.- El Centro de Reinserción Social para Adultos de Actopan se ha convertido en “La Cárcel del Terror”, ahí los derechos humanos no valen. Familiares temen por la vida de un interno que, aseguran, está enfermo y le niegan el medicamento, además en forma recurrente es objeto de agresiones a manos de Cuauhtémoc Valdés Lugo.
Elvira Lorena Barragán Barreiro, hija del interno Alejandro Barragán Castillo, encabezó a los integrantes de una familia que pidieron una entrevista con EL REPORTERO para exponer graves irregularidades que existen en el centro penitenciario de Actopan. Responsabilizan a la directora Eréndira Zavala Licona de lo malo que pueda ocurrirle a su pariente y familiares.
Explicaron que hace un poco más de dos años, Alejandro Barragán Castillo, de 44 años, fue detenido por estar involucrado en el delito de homicidio en grado de tentativa, al parecer todo fue un teatro, su familiar niega estar involucrado y nada han podido comprobarle, empero, las autoridades se empeñan en tenerlo tras las rejas.
Comentaron que una vez tras las rejas, Alejandro se mostró muy participativo con autoridades e internos en las labores para tener en buen estado las instalaciones, ahí apoyo en acciones de pintado del inmueble, reparación y vestimenta de imágenes religiosas y hasta con la dotación de sus alimentos que generosamente compartía con las autoridades del penal, principalmente, cena de navidad.
Su dedicación al trabajo y apoyo en diversas actividades solidarias lo llevaron a ser temporalmente encargado de galera.
Lamentablemente, hubo cambio de directora y llegó Indira Zavala Licona, mujer a quien califican de prepotente, altanera y carente de ética, inclusive, afirman que ignoran como llegó al cargo de directora del centro penitenciario, pues primero debió recibir por lo menos un curso de valores y relaciones públicas.
Establecieron que la llegada de esa directora casi coincidió con la escasez de dinero de la familia del interno, ya no podían llevar bastantes beneficios o alimento para todos, así que empezaron los malos tratos.
NIEGAN EL MEDICAMENTO
Establecieron que el interno tiene serios problemas de salud, ya sufrió un pre infarto, por prescripción de un médico especialista debe tomar medicamento controlado Tafil, mismo que nunca tienen en la prisión, los familiares hacen esfuerzos por adquirirlo y llevarlo, pero no se lo entregan, ignoran cual sea el destino.
Afirmaron que el penal tiene un médico, pero este nunca se encuentra, así que cualquiera al azar receta analgésicos, productos para la gastritis o agua a los internos que están enfermos, es decir, juegan con su salud.
Como ejemplo de esos abusos refieren que en una ocasión le llevaron tacos de carnitas y frijol, lamentaron que a su familiar solamente le dieron lo de frijol, el resto se lo comió el personal del centro penitenciario.
Buscaron pasarle una sudadera y se lo impidieron por la gorra, pero en el interior gran parte de la población trae gorra, así que es una acción discriminatoria. Otro abuso fue a un hermano del interno intentaron retirarle el pase de acceso a la visita de su hermano.
AHORA ES GOLPEADO
Los quejosos afirmaron que a su familiar le ponen los candados de mano o esposas para hacerle frecuentes cateos del dormitorio, además es objeto de golpizas a manos de Cuauhtémoc Valdés Lugo, quien identifican como policía estatal que, al parecer, fue ascendido a Director General de Prevención y Reinserción Social, mismo que le pega donde hay puntos ciegos de las cámaras de video del penal y le advierte que le dará un balazo en la frente y lo hará pasar como accidente, otro de los agresores es un gendarme de apellido Villedo.
Establecieron que apenas el martes fueron a hablar con la directora Indira Zavala Licona, misma que se negó a recibirlos, los atendió por una ventanita, la respuesta real fue contra su familiar a quien le dieron una golpiza por la noche, además fue despojado de sus cobijas y lo pasaron a una celda sucia, un auténtico cuchitril de l parte alta del CERESO donde supuestamente le serán restringidas las visitas y derechos.
Refieren que al enterarse que Alejandro fue golpeado, la esposa llegó a verlo después de las siete horas de ayer, por instrucción de la directora le impidieron el acceso, fue dos horas después cuando le permitieron la entrada y notó que Alejandro estaba golpeado, tenía un chipote en la frente y un hematoma en la espalda baja, inclusive, lo maquillaron para evitar que vieran las lesiones.
Al darse cuenta que estaba golpeado el interno, uno de sus hermanos pretendió denunciar los hechos ante el agente del Ministerio Público a nombre del afectado, solamente así sería revisado por un médico legista, sin embargo, se negaron a iniciar la carpeta en Actopan.
Exigen apoyo para que le sean respetados sus Derechos Humanos, establecieron que nada se le ha comprobado, sin embargo, hasta los perores criminales tienen derechos.
PERDIERON LA CONFIANZA EN LA CDHEH
Establecieron que ya perdieron la confianza en la Comisión de los Derechos Humanos del Estado de Hidalgo, en forma recurrente solicitaron su intervención, sin embargo, nunca han tenido una respuesta satisfactoria, parece que protegen al personal del CERESO de Actopan.
Como ejemplo citaron que ya hay una queja con número CDHEH-VG-1129-18, la tiene el empleado Jonathan Cabrera, mismo que nada hace, le da largas al asunto para ganar tiempo y evitar fundamentar una recomendación en contra de los malos funcionarios.
Los familiares del interno pidieron la intervención de una autoridad superior capaz y con voluntad de poner orden, pues temen por la integridad física de su familiar y establecieron que responsabilizan a las citadas autoridades de cualquier agresión en contra de la familia.
La joven Elvira Lorena Barragán Barreiro dijo que confían en la política del gobernador Omar Fayad Meneses, mismo que está en contra de la corrupción y abusos de malos funcionarios, por eso pide la intervención del ejecutivo estatal para terminar con la pesadilla que sufre su familiar en el referido CERESO de Actopan.
